miércoles, 19 de febrero de 2014

Mi experiencia con las bañeras

Gracias a los regalos de amigos y familiares tenemos 4 bañeras diferentes en casa.

Es difícil elegir la bañera más adecuada para cada bebé, así que he decidido compartir mi opinión sobre las mías por si a alguien le puede venir bien.

La primera bañera que nos regalaron fue esta. Es de Prenatal. Plástica y con superficie antideslizante. No la hemos usado todavía ya que es bastante grande, demasiado para Leyre que aun es pequeña. La parte mala es precisamente esa, que es muy grande. Demasiado para recien nacidos y además no cabe dentro de la bañera del baño. O se le pone patas / un soporte (ocupando muchísimo espacio), o se le baña al bebé sobre el suelo (dolor de espalda asegurado).




La segunda bañera que nos regalaron es la famosa Tummy Tub. Es una bañera en forma de maceta. Está muy de moda. El bebé se queda en posición fetal y se relaja porque le recuerda al vientre de mamá. La parte buena es que, al relajarse, el bebé suelta gases y ayuda con los cólicos. La parte mala es que tienes que estar sujetando al bebé con ambas manos o si no se escurre, lo que hace dificil lavar y enjabonar al bebé. Así que, para los gases o niños agitados la recomiendo, para bañar al bebé a diario con jabón no.


                                  


La tercera bañera que tenemos es una hinchable de Winnie de Pooh. Es la que mas hemos usado. Esta en concreto trae una segunda pieza hinchable que sujeta al bebé cuando son pequeñitos y no se sientan solos. El truco está en poner ese segundo hinchable en el lavabo del baño y bañar al recién nacido. Cuando el bebé crece un poco (sobre los dos meses), se utilizan los dos hinchables dentro de la bañera de los adultos y listo. La parte mala es que, al meterla en la bañera de adultos, se acaba forzando la espalda y acabas deslomado. 

                       

La cuarta bañera venía con la cómoda-cambiador que compramos en Toys r Us. Nunca pensé en usarla, pero al usar la hinchable me dolía la espalda al agacharme y decidí probar. La cómoda tiene ruedas pero no la llevo al baño cada vez, entre otras cosas por no molestar a los vecinos de abajo con el traqueteo. Lo que hago es llenarla de agua utilizando un cubo. Una vez bañada la niña, vacío el agua cómodamente al cubo mediante un tubito de desagüe que trae la bañera. La verdad es que es comodísima, sobre todo para mis riñones. Me arrepiento de no haberla usado antes. La parte mala es que la bañera es dura y la niña no está del todo cómoda. Mi truco es meter la pieza hinchable de la bañera anterior y así perfecto.

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